Humus. La delicia primigenia y deleite de reyes.

Por Marco Guerrero

ILUSTRACIÓN. MARCO GUERRERO

El garbanzo, esa pequeña bolita que luce tan insignificante cuando la vemos individualmente y que luce tan sencilla y tan poco sofisticada cuando vemos miles de ejemplares conformando un kilogramo, cuyo precio es tan accesible para cualquier bolsillo pero que fue una parte esencial para la creación de la civilización. El garbanzo, es, junto a la lenteja, la primera legumbre que fue cultivada por la humanidad , ergo, el garbanzo ha alimentado a nuestra especie desde hace mas de 5000 años.

En los focos de civilización como la ribera del Río Nilo, en Mesopotamia, en el Valle del Indo y claro, en tierras del Creciente Fértil y el Levante Mediterráneo, donde actualmente se asienta parte del mundo árabe, el garbanzo ha sido parte fundamental de la canasta básica tanto para el campesino mas humilde hasta para los mismos reyes y poderosos gobernantes en una presentación que en esencia, es lo mas básico que puede existir, el Humus…. pero en lo mas sencillo, suele encontrarse lo que enamora nuestro paladar.

El Humus no es mas que el resultado de hacer puré garbanzos cocidos con una serie de ingredientes, pero en esencia, bastaría simple sal y aceite para darle textura, aunque ya sabemos que con algo de limón, tahini y otros ingredientes, podemos potenciarlo mucho.

Esta documentado que el humus en la preparación que lo conocemos: puré de garbanzo, limón, ajonjolí (tahini), aceite y ajo era consumido por los mismos faraones egipcios, que lo degustaban como la principal guarnición de un plato de delicioso pescado o algún producto de caza, pan y vino o cerveza. Lo mismo sucedía en las mesas de los poderosos autócratas persas, que desde Babilonia, gobernaron los primeros grandes imperios del mundo y que las poderosas falanges helénicas que marchaban a la orden de Alejandro Magno degustaban de este platillo por su sabor y por su enorme valor nutricional y hasta algunos monarcas europeos y pontífices lo llegaron a degustar, sobretodo en tiempos de Cuaresma o en alguna recepción con embajadores orientales.

En la cocina libanesa, el humus es fundamental, al punto que se dice que el mejor humus es que se prepara al estilo libanés y es, sin duda, a través de los migrantes libaneses que este platillo ha conquistado el mundo moderno.

¿Ya probaste el de La Doña?

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